miércoles, 14 de junio de 2017

Tema 9 - Página web de prebautismales

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Tema 9

LA CELEBRACION LITURGICA DEL BAUTISMO,

LOS SIGNOS

OBJETIVO

Conocer los signos utilizados en la
celebración del Bautismo para captar la profundidad del misterio que
reaIizan y distinguir lo esencial de lo
complementario






“Todos ustedes, al ser bautizados en Cristo, se revistieron de Cristo"

(Gál 3, 27)





NOTAS PEDAGOGICAS

En nuestra vida diaria utilizamos
diversos signos, los cuales conocemos y entendemos: saludo, abrazo,
beso, semáforos, letreros de parada del camión, etc. y cada uno
de ellos nos indica algo en particular.






Asimismo, en la celebración de los
sacramentos, en nuestro caso el Bautismo, utilizamos diversos signos que
vienen a ser expresión de la presencia de Jesús entre
nosotros. Lamentablemente en éste, así como en los otros
sacramentos, muchas veces se cae en la utilización de signos que no
pertenecen a la celebración del sacramento y responden más a una
costumbre socia] que queremos imitar.






El catequista deberá conocer cada
signo a fondo para poder explicarlo al grupo. Puede ayudar a la
presentación de este tema el que se desarrolle alrededor de la pila
bautismal y se preparen con anticipación todos los signos que se
utilizan.






De no ser posible lo anterior, preparar en dibujos cada uno de los signos.




VEAMOS



Se propicia un diálogo a partir de las siguientes preguntas:

¿Qué significado tienen para ustedes los siguientes signos?

- saludo entre amigos

- abrazo entre compadres

- bendición a un hijo antes de un viaje

- una flor entre novios

- besar un crucifijo






"El sacramento es preparado por la Palabra de Dios" (CIC 1122), que "ilumina con la verdad revelada a los candidatos y a la asamblea y suscita la
respuesta de fe, inseparable del Bautismo
" (CIC 1236).






Luego se dice la oración de los fieles
y se invoca a los santos, siendo conveniente añadir sobre todo el
nombre del santo patrono del niño y del templo o
lugar.





Unción prebautismal.

La unción con aceite de oliva
bendecido y consagrado por el obispo es un signo que expresa muy bien
los diversos dones de Dios y sus efectos espirituales: bendición,
bienestar, purificación, fortalecimiento, donación de plenos
poderes, realeza y esplendor (ver Pro 27, 9). Se encuentra desde la
antigüedad en la consagración de reyes y sacerdotes (ver 2 5am
2,4.7; 5, 3.~7)






Los que van a bautizarse son ungidos
en el pecho con el óleo de los catecúmenos para recibir la fuerza de
Dios (ver Is 1,6; Lc 10, 34) al empezar la vida cristiana
siendo fortalecidos en la lucha contra el mal. Esta unción es
precedida por una oración de exorcismo, inspirada en gestos y palabras
de Jesús en favor de algunos de sus contemporáneos a los que
tenían encadenados los espíritus del mal (ver Mc 5, 1-20), en la que
se pide la liberación del pecado y de su instigador, el diablo (ver CIC
1237), para que los candidatos al Bautismo puedan
convertirse en templos del Espíritu Santo. "Así, preparado, puede
confesar la fe de la Iglesia, a la cual será 'confiado' por el Bautismo"
(CIC 1237).





Bendición del agua.

El agua es signo de limpieza,
regeneración, fecundidad, fertilidad y de vida (ver Ez 36, 25; Jn 4, 11
ss; Jn 3, 5; Gén 1, 2; 1 P 3, 20).






El agua aparece también como signo de
la vida y de la muerte, aunque acentuando el aspecto positivo de fuente
de vida ya que el Bautismo es un sacramento que nos
hace nacer a una vida nueva y nos incorpora al misterio de Cristo
para morir y resucitar con El a la vida nueva de hijos de Dios.






El agua bautismal mediante una oración
es consagrada en ese mismo momento (o en la noche de Pascua). "La
Iglesia pide a Dios que, por medio de su Hijo, el poder del
Espíritu Santo descienda sobre esta agua, a fin de que los sean
bautizados con ella 'nazcan del agua y del Espíritu' (Jn 3, 5)" (CTC
1238).





Renuncia y profesión de fe.

Las renuncias al pecado y al autor del
pecado significan una declaración de guerra contra todo lo que se opone
al vivir del Evangelio.






La profesión de fe en Dios significa
un compromiso de vivir de acuerdo al estilo de vida de Jesús, al
espíritu de las Bienaventuranzas.






Las renuncias y la profesión de fe de
los papás y padrinos, así como de la comunidad con el "Amén" son una
actualización del propio Bautismo. Además expresan la fe
de la Iglesia, fe en la que serán bautizados los pequeños.






Las preguntas de renuncia y de
profesión de fe se dirigen a los papás y padrinos ya que son ellos (con
el apoyo de la comunidad) los que se comprometen a poner los
medios necesarios para que los niños crezcan en la fe.





Bautismo.

"Sigue entonces el rito esencial del
sacramento: el Bautismo propiamente dicho, que significa y realiza la
muerte al pecado y la entrada en la vida de la Santísima
Trinidad a través de la configuración con el misterio pascual de
Cristo" (CIC 1 239). "Consiste en sumergir en el agua al candidato o
derramar agua sobre su cabeza, pronunciando la invocación de
la Santísima Trinidad, es decir, del Padre, del Hijo y del Espíritu
Santo" (CIC 1278).





Unción con el Santo Crisma.

Esta segunda unción que se realiza
después del rito del Bautismo se realiza sobre la coronilla del pequeño y
se hace con el Santo Crisma óleo perfumado y consagrado
por el obispo. Somos consagrados con el santo crisma (ver CIC 1 294)
para entrar a formar parte del Pueblo de Dios y ser miembros de Cristo
sacerdote, profeta y rey (ver CIC 1241).






La unción con el santo crisma es un
signo del don del Espíritu (ver CIC 1241), que, como el aceite,
impregna, penetra, suaviza, cura, fortalece y perfuma. Y los
ungidos participan de la nueva vida en Cristo.






Es recomendable que una vez realizadas
la unción prebautismal como la del santo crisma, no se limpie el pecho o
la coronilla del pequeño nada más porque ya se
realizó el signo, pues parecería que nos avergonzamos de lo
realizado y queremos borrar enseguida lo que hemos hecho.





La vestidura blanca.

El origen de este signo esta basado en
las palabras de San Pablo en su carta a los Gálatas: "Todos ustedes, al
ser bautizados en Cristo, se revistieron de Cristo"
(Gál 3, 27).






La vestidura que se impone a los recién bautizados es blanca porque es signo de haber resucitado con Cristo (ver CIC 1243).




El cirio.

El simbolismo de la luz está en sí
mismo, no en los adornos de la vela. Para el bautizado será luz (ver Is
60), lámpara para sus pasos, luz en su corazón (ver Sal 11
8), luz que ilumina a toda persona como presencia del Señor (ver Jn
1).






La luz también es signo de vida (dar a
luz), de la verdad (caminar a oscuras es sinónimo de ignorancia y
confusión), del amor (la llama del amor).






"El cirio que se enciende en el
cirio pascual, significa que Cristo ha iluminado al neófito. En Cristo,
los bautizados son 'la luz del mundo
” (Mt 5, 14)"
(CIC 1243).






El cirio que ha recibido el bautizado
se debe conservar no sólo como recuerdo, sino que puede ser utilizado el
día de su Confirmación y Primera Comunión para poner
de manifiesto la relación entre estos sacramentos como iniciación
cristiana.





Effeta

El celebrante toca con el dedo pulgar
los oídos y la boca del niño y pide al Señor le conceda, a su tiempo,
escuchar su palabra y profesar la fe, para alabanza y
gloria de Dios Padre.





Padre Nuestro

El nuevo bautizado es ahora hijo de
Dios en Cristo (ver CIC 1243). Sus papás, padrino y la comunidad
cristiana, en su nombre, dirigirán al Padre la oración que
Jestis nos enseño: el Padre Nuestro.






Para el bautizado "la entrega de la Oración del Señor significa el nuevo nacimiento a la vida divina" (CIC 2769), y aprenderá "a invocar a su Padre con
la única Palabra que El escucha siempre
" (CIC 2769).





La bendición solemne.

"La bendición solemne cierra la
celebración del Bautismo. En el Bautismo de recién nacidos, la bendición
de la madre ocupa un lugar especial
" (CIC
1245).






El celebrante felicita y bendice a las mamás (que sostienen a su hijo en brazos), a los papás y a la comunidad presente.




ACTUEMOS

Se forman pequeños grupos y partiendo de las siguientes preguntas tratan de llegar a un compromiso concreto:

¿Qué conoce comúnmente la gente sobre la celebración y los signos del Bautismo?

¿Qué hemos aprendido nosotros el día de hoy en esta catequesis?

¿Qué vamos a hacer nosotros (papás y padrinos) para que los signos
de la celebración del Bautismo se conozcan, entiendan y utilicen
adecuadamente?






Se puede hacer un breve compartir en el grupo general sobre el compromiso de la tercer pregunta.




CELEBREMOS

En una mesa se colocan los signos
utilizados en la celebración del Bautismo. Las personas se colocan en
semicírculo alrededor de la mesa.  Observan un momento
los elementos que se encuentran en la mesa.






Se les pide que algunos pasen y escojan unos de los signos, lo tomen en sus manos y vuelvan con el a su lugar.





Se proclama la lectura del capítulo 3
del evangelio de San Juan del versículo 1 al 6. Se deja un momento de
reflexión personal en silencio.






El catequista invita a los que tienen
algún signo en sus manos a hacer una breve oración partiendo de ese
elemento y su significado.






Decimos juntos la oración de los hijos de Dios, agradeciendo el don del Bautismo.




TERMINEMOS CANTANDO:

Pueblo de Reyes



Pueblo de Reyes, asamblea santata,

pueblo sacerdotal, pueblo de Dios,

¡bendice a tu Señor!



Te cantamos ¡oh Hijo amado del Padre

te alabamos, eterna Palabra salida de Dios.

Te cantamos, oh Hijo de la Virgen María,

te alabamos, oh Cristo, nuestro hermano,

nuestro Salvador.



Te cantamos, a ti, Esplendor de la gloria,

te alabamos, Estrella radiante que anuncias el dia

Te cantamos, oh Luz que ilumina nuestras sombras,

te alabamos Antorcha de la nueva Jerusalén.



Te cantamos, Mesías que anunciaron los profetas,

te alabamos, oh Hijo de Abrahám e Hijo de David.

Te cantamos, Mesías esperado por los pobres,

te alabamos, oh Cristo, nuestro Rey de humilde corazón.



Te cantamos, Mediador entre Dios y los hombres,

te alabamos, oh Ruta viviente, camino del cielo.

Te cantamos, Sacerdote de la nueva alianza,

te alabamos Tú eres nuestra paz por la sangre de la cruz



Te cantamos, cordero de la Pascua eterna,

te alabamos, oh Víctima que borra nuestros pecados.

Te cantamos, oh Templo de la nueva alianza,

te alabamos, oh Piedra Angular y Roca de Israel.



Te cantamos, Pastor que nos conduces al reino,

te alabamos, reúne a tus ovejas en un redil.

Te cantamos, oh Cristo, manantial de la gracia,

te alabarnos, oh Fuente de agua viva que apaga nuestra sed.



Te cantamos, oh Viña plantada por el Padre,

te alabamos, oh Viña fecunda, nosotros tus sarmientos.

Te cantamos, oh Cristo, maná verdadero,

te alabamos, oh pan de la vida que el Padre nos da.



Te cantamos, Imagen del Dios invisible,

te alabamos, oh Rey de justicia y Rey de la paz.

Te cantamos, Primicias de aquellos que duermen,

te alabamos a ti, el Viviente, principio y fin.






 


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